MILKA

Quería compartir con vosotros, unas palabras que quise liberar de mi corazón roto, por esta perdida que sufrí hace tiempo y que quise como nunca en mi vida. Ella me enseño, que todos los animales sean de la raza que sean, merece ser amado. Gracias por formar parte de mi vida.

Querido Diario, Necesito escribirte porque tengo el alma y el corazón roto. La perdí, se fue el día 8 de Junio del 2015, y ya nunca más la volveré a ver. Su maldito bazo lleno de quistes y el ritmo cardiaco irregular no lo pudo superar. Ya casi ni tenia fuerzas, ni podía andar, no se movía, ni comía, parecía que sufría, y tomamos la decisión mas dura del mundo.

Su médico nos lo recomendó. -Que no sufra.

Yo tampoco podía verla sufrir, en el estado en el que estaba. La pusieron una especie de sedante o tranquilizante, y no se cuanto tiempo esperamos, solo se que la cogí en brazos y empecé a cantarle una canción de cuna. Mis lágrimas reposaban en su piel, mojando su pelaje corto. Jamás olvidare esos ojos que me miraban mientras la mecía y me despedía de ella, diciéndole cosas bonitas, a esa cosita tan pequeña llamada Milka, que lleno mi corazón durante 6 años de mi vida. La mejor personita que he conocido, mi buñuelito como yo la llamaba.Después de despedirme de ella, la veterinaria estaba lista. La coloque sobre la camilla, y la inyección surgió efecto. Consolaba a mi madre, que no podía contener su llanto, y la veterinaria nos dio un fuerte abrazo, afectada diciéndonos que lo sentía mucho.
Al llegar a casa se nos hizo duro, su casita vacía, sus bebederos, su sabana, su cubo, sus juguetes, su edredón, su cacharrito de dibujos lleno de pienso... Ya nunca los utilizaría. Cada día que pasaba nos sentíamos morir, y nos preguntábamos porque ha sido tan rápido todo esto.Cuando no iba a trabajar, ella me despertaba a mordisquitos de la cama, y me daba besitos mientras la besaba. Ya no la tengo para pedirme carantoñas, ni que me de esos besitos tan ricos en mi cara. Y ahora, Ir a su habitación, y no verla dormir en su casita, o morder los barrotes, para que la sacáramos por la mañana, es muy duro. Al tercer día bajamos todo al trastero, y sus cositas en una caja. Ella era un Hurón muy independiente y egoísta que no quería que nadie se metiera en su casita. (Jaula).
Ahora, sabiendo que ya no está, voy a tardar en comer cosas, que a ella le gustaban. Te miraba hacia arriba y te daba con sus manitas para que la dieras comida. Cosas como la sandia, el melón, el maíz, la horchata, el tomate, el pepino, la calabaza, la patata… No podría comérmelo sabiendo que yo puedo y ella no. No soy capaz. Aun es reciente, pero ha dejado un vacío en mi vida que nadie podrá llenar. Me siento como si una parte de mi se hubiera ido con ella. Por eso decidí, que ya no quiero más Hurones, no por nada sino, que otro como ella no habrá, eso es imposible, porque ella fue y será era única para mi.
Solo me falta decir:Hasta siempre Milka. Espero que estés bien sin sufrir en el arcoíris. Ojala y nos volvamos a ver.Mi madre la consideraba su hija, yo mi bebe porque son lo mejor del mundo, el cariño que desprenden no te lo da nadie como ellos, es un sentimiento tan fuerte, ese vinculo que te une a tu animal, que nadie entiende, es mágico y cuando se te muere ese vinculo lo pierdes con el. Gracias Milka por esos años de mucho amor. Hasta siempre mi pequeña buñuelito.